
¿Cómo crecer, cómo evolucionar, cómo estar mejor, más en armonía?
El secreto es mantener el eje, vivir el mayor tiempo posible alineado y en neutralidad.
Y esto en todos los aspectos del ser, comenzando por lo corporal, por la postura.
Nuestra energía fluye por el eje central de nuestro cuerpo. Necesitamos que fluya adecuadamente.
Desde la actitud corporal le informamos a nuestro sistema como queremos que fluya. Si estamos torcidos, desparramados o doblados no habrá alineación posible.
Desde la postura comunicamos a cada uno de nuestros cuerpos sutiles como queremos que se comporten, y ellos obedecen porque somos los que tomamos las decisiones. Somos los diseñadores de nuestra vida, de nuestra experiencia en este plano de existencia.
Habrán observado que al caminar erguidos y mirando hacia arriba no se puede manifestar depresión. La depresión conlleva una postura como de encorvarse para adentro y mirar hacia abajo. Es cierto que no voy a resolver una depresión sólo desde el cambio de postura, pero si ,ese cambio es un paso muy importante en su resolución, porque estamos comunicando desde lo postural nuestra intención de estar bien a todo nuestro sistema mente, cuerpo, espíritu, el cual actuará en consecuencia.
Volver el eje es hacerse cargo de uno mismo.
Al estar en el centro podemos conectarnos intencionalmente con la Tierra y con el Cielo y recibir la información del Universo sin entrar en los laberintos de la mente. Podemos entrar automáticamente en neutralidad y elegir sin juicios ni condicionamientos.
Patricia Sahade