“Si estás asombrado por la complejidad y sutileza de la capacidad de sanación que tienen las flores, sólo recuerda qué cosa es la flor misma. Estas complejas y bellas formas de color y fragancia fueron originalmente hojas. ¡Si, fueron hojas!
Luego de millones de años de reproducirse perfectamente bien, las plantas repentinamente transformaron algunas de sus hojas en flores, y comenzaron a atraer más vida hacia ellas. Las flores han ido mucho más allá de la simple necesidad de crecer y multiplicarse. Un deseo dentro de cada especie se ha manifestado en forma única. Dentro de esta forma se alojan los secretos de ese deseo.
Lo que se plasma en una esencia floral es ese deseo, el potencial de transformación hacia algo más evolucionado más radiante y más sutil”
Del libro “Walkabout Healing Handbook” de Vasudeva y Kadambii Barnao
Las esencias florales son preparados energéticos, portadores de energías armónicas.
Se logran fijando la energía esencial de la flor en agua pura por medio de la luz solar y algunas veces de la luz lunar.
La acción de las esencias florales consiste en crear un estado de conciencia que limpia los desequilibrios en los cuerpos sutiles de la persona, lo cual termina por reflejarse en la salud del cuerpo físico.
La acción es en general muy suave y se percibe como una ampliación de conciencia en torno a determinados temas. Surgen de esta manera puntos de vista diferentes. Aspectos que tal vez nunca fueron considerados y que representan alternativas que aportan una solución liberadora para la persona.
Lo que sucede es que se produce un acercamiento entre el alma y la personalidad y la persona tiene la oportunidad de expresar en mayor medida al ser que realmente es.
Esto trae una enorme paz y serenidad al mismo tiempo que permite a la persona un abordaje suave y amoroso de los temas que necesita resolver.
Con ayuda de las esencias florales facilitamos que cada ser pueda equilibrarse. Ese equilibrio se ve luego reflejado en todos los aspectos de la vida de la persona, aún en su salud. Sin embargo es importante aclarar que el abordaje no es desde la enfermedad sino desde el estado emocional y espiritual.
Patricia Sahade